En la década de los setenta y por relaciones familiares, (casado con Ángeles Pérez Rosano) llega a Facinas Joaquín Maqueda, un linense afincado en Rota y que trabajaba en la Base Naval.

Su carácter abierto hace que conecte rápidamente con la juventud, especialmente con los aficionados al fútbol que por aquella época jugaban en un campo lleno de maleza, con porterías de piedra y con balones rotos. De vestimentas o calzados deportivos se carecía por completo.

Se quedó impresionado de cómo a pesar de tantas dificultades, existía una gran afición, incluso había jóvenes que destacaban por sus habilidades y facultades.

Comentaba la diferencia que existía con la Base Naval, donde tenían todo lo que necesitaban con mucha menos afición, incluso con menos facultades.

Aquella comparación que él consideraba injusta, le llevó a proponerse el dotar a los jóvenes y niños de Facinas de todo lo necesario para que jugaran al fútbol en unas condiciones decentes.

No tenía ningún poder económico, pero invirtió todo lo que pudo para que en poco tiempo se acondicionara un terreno de juego con porterías de reglamento, vestuarios, equipaciones con botas para cuatro equipos ( dos de niños y dos de mayores).

En definitiva, trajo la ilusión a toda la juventud de Facinas, consiguiendo con ello que desde entonces nos acostumbráramos a practicar el fútbol con todos sus elementos.

No olvidaremos aquel 15 de agosto de 1970 inaugurando el Campo del Matavaca en un partido entre el” NAVY EXANGE” de Rota y el Facinas C.F. Con victoria del equipo local por 8 a 4. Ni los partidos entre los infantiles con equipaciones completas “Los Verdes contra Los Rayados”.

Amaba a la juventud y decía que ayudándole a practicar deporte los alejábamos de otras “aficiones” más peligrosas. Encontró un grupo de jóvenes del pueblo que trabajaron con él en todas las actividades.

Durante muchos años visitaba regularmente Facinas, donde contaba con un nutrido grupo de amigos. No faltó nunca su colaboración para actividades deportivas y festivas.

Falleció en accidente de tráfico a su regreso de una de sus visitas a este pueblo.

En su memoria los aficionados decidieron que el campo de fútbol se denominara “CAMPO MUNICIPAL DE FÚTBOL JOAQUÍN MAQUEDA”.

Ahora, al construirse un campo nuevo, éste se llama

“ CAMPO MUNICIPAL DE FÚTBOL NUEVO JOAQUÍN MAQUEDA”.

Es una demostración de cómo en Facinas sabemos agradecer y valorar el trabajo y cariño que nos dedican aquellas personas que sin ser naturales de aquí han sentido la necesidad de colaborar para mejorarnos.

Hoy su hijo Joaquín muestra también un cariño especial por nosotros.

Joaquín Maqueda, por su carácter, por su amabilidad y por haberse preocupado del don mas importante que tiene un pueblo que es su juventud, merece ser recordado siempre en Facinas como uno mas de sus vecinos.

Hijo de Manuel  y de Margarita, de Chipiona, nació en Sevilla  en Agosto de 1936, en plena guerra civil. Era el 4ª de ocho hermanos.
Su padre Manuel, natural de Carmona (Sevilla), fue cabo furriel durante la Guerra, por lo hizo que ándase dando tumbos por la geografía española, por lo cual cada hijo nacería en un lugar distinto: dos en Cartagena, dos en Sevilla y otros en La Línea de la Concepción, donde terminó  su servicio militar y donde posteriormente se afincó .  Allí regentó    el Bar Pato, situado frente a la frontera de Gibraltar, que en aquella época tenía un gran movimiento de trabajadores ingleses y españoles.
Fue allí, en el Bar Pato, donde  Joaquín, la vez que ejercía de aprendiz de mecánico de coches, empezó a hacer sus pinitos en la hostelería ayudando a su padre en el bar.  Debido a la afluencia de ingleses tuvo la capacidad de aprender el  inglés, mas hablado que escrito, cosa que le vino muy bien para su posterior traslado a Rota.
Durante su estancia en La Línea  conoció a Juana Mª , una hermosa muchachita que le robó el corazón y con la que contrajo matrimonio en 1963, a la edad de 27 años.

Una vez cerrada la frontera de Gibraltar,  el trabajo decayó mucho. Fue entonces cuando él y un grupo de jóvenes ilusionados de allí llegaron a Rota en busca de un puesto de trabajo. El dominio del ingles, cuando casi nadie lo tenia  en Rota, les vino muy bien, lo que les  facilitó el que encontrasen trabajo pronto. – un recuerdo también para esos muchachos linenses que en aquella época dejaron su pueblo para buscar un futuro mejor y se asentaron en Rota donde se integraron y formaron parte de su tejido laboral y social: Rogelio, Paco Pérez, Robert, Diego, Sebastian Ros, Pepe y tantos otros…”.
Una vez afincado en Rota y con su trabajo asegurado comenzó a trasladar a su familia a Rota. Primero a sus hermanos José Antonio y Manolito y posteriormente a sus padres y hermanas solteras Julia, Custodia, Puri y Margari. Comenzaron a vivir de alquiler frente donde hoy se encuentra la gasolinera del pueblo, en la Avda. María Auxiliadora. Posteriormente se  compraron una vivienda en la Plaza de la Hispanidad donde aun viven Custodia, Puri y Julia.

Joaquin y Juana Maria con su hijo Joaquin y en la Feria de la Linea
Fruto de su matrimonio con Juana María  tuvo a un hijo, Joaquín Fernando. Posteriormente Juana Mª volvió a quedar embarazada de gemelos, con la mala fortuna de morir en el parto en 1965. La muerte de su esposa  produjo un profundo impacto en su vida, en su entorno familiar y afectivo. Tanto su familia como  la familia de su esposa se volcaron para que padre e hijo,  en  la medida de lo posible,  notasen lo menor posible la falta de el calor de una esposa y madre.
Fue entonces, debido a la necesidad de dejar de pensar en la tragedia acaecida y la necesidad de ocupar su tiempo libre cuando  Joaquín emprende negocios.

Arriba de izquierda a derecha: Nati, Custodia y Puri. Abajo de izquierda a derecha: Jose Antonio, Fernando y Joaquin Maqueda en la navidad de 1989
Por aquel entonces Joaquín trabajaba en la Base , en la Navy Exchange  e hizo sus pinitos montando una lavandería y también llegó a tener la licencia de un taxi a medias con otro compañero. Paralelamente  vendía o repartía lotería entre sus compañeros de trabajo y amistades que él  mandaba  traer desde distintos puntos de la geografía nacional . En casa recuerdan que una vez incluso llegó a  dar un Segundo o Tercer Premio.
En 1968 su vida vuelve a dar un giro. Por amor, cariño o necesidad o quizás  por las tres cosas a la vez – comenta su hijo Joaquín – contrae matrimonio con Ángela, hermana menor de su  fallecida esposa Juana María. Eso conllevó que dejasen de vivir en Rota y se trasladasen a vivir a Jerez de la Frontera donde trabajaba de telefonista su nueva esposa. Allí pasaron un periodo de 5 años  hasta que ella después de tener un hijo y también morir   éste  por problemas de sarampión, se vuelve a quedar embarazada de su hija Mª Ángeles y se vuelven a trasladar a Rota en 1972. Se van a vivir a la calle calvario, nº 60, junto al Bar Gallo, lugar de encuentro de muchos trabajadores y aficionados a los gallos de pelea y los toros bravos. En 1975 se trasladan a vivir a los pisos de Zafer, en El Molino, donde nacería la menor de sus hijas, Mª Elena.

Joaquin, Jose Antonio, Jose y Puri en la CasetaMunicipal de la Feria
El primer negocio de Hostelera que monta en Rota Joaquín Maqueda, padre,  fue la cantina del estadio de futbol Punta Velas, en la trabajaban entre otra personas su padre Manuel, José “el Chato”, Enrique…. Posteriormente arrendó el Club Urta y en 1974 se hizo cargo del Bar Playa, negocio que hoy sigue regentando su hijo Joaquín.
En los años setenta y ochenta junto a un grupo de fieles amigos, Vicente Pons, Joaquín Barrera, Ángel Muños entre otros, y de su mano derecha Manolín comienza una larga trayectoria acompañada por las Feria de Primavera, Las Feria de la Urta y las Patronales, teniendo a su cargo el suministro de  un gran número de de Casetas. En la Feria de Primavera tenían  las Casetas  Municipal, Amistad, La Peña Linense, La Americana, la de los Ganaderos y labradores, el Club de Funcionarios, La Roteña… y algunas portátiles como la de la Fundación Zoilo Ruiz Mateos, la del PP y la de la Juventud (hoy en día Caseta de la III Edad).
De 1980 a  1990 tubo a su cargo la entonces conocida como “Caseta Americana” , hoy Caseta La Espuela, donde, a la vez que estaban abierto al publico, se empezó a hacer eventos tales como bodas, comuniones, etc…
Los años que se montaban las Fiestas patronales en la Cruz del Rompidillo se montaba una especie de Casta municipal donde se suministraban tapas, raciones y bebidas. Y en la época de la Feria de la Urta, en la Caseta municipal se hacían espectáculos de artistas de renombre de la época, como Beti Misiego.
Posteriormente cogieron  el Ambigú  (servicio de tapas y raciones) del polideportivo para el suministro de bocadillos y bebidas para las actuaciones de Lola Flores, Roció Jurado, Mecano, Rafaela  Carra, Chiquetete, Pepe Darosa, etc.
También hicieron infinidad de eventos para el Ayuntamiento, tales como la cena de la Damas. Almuerzo de Funcionarios, Almuerzo de la III Edad, Cena de Reyes Magos, Entrega de Trofeos, Inauguraciones de Dependencias municipales, piscina, parques, calles, eventos deportivos, regatas, etc.
Estando de alcalde Fernando Tejedor hicieron las Jornadas Gastronómicas realizadas durante las ferias de Primavera y Urta . Durante a  gestación de la hoy construida “La Ballena”  tuvieron a su cargo un servicio de restaurante en la parte alta del Pabellón Municipal donde atendían a  los Tour Operadores, dándoles  a conocer nuestra mas típica gastronomía: Urta , arranque, guisos marineros, berzas…
También estuvieron atendiendo viajes a los pescadores de la Cofradía de Pescadores del Puerto de Santa María,  gracias a la amistad entre Juan Montes y Joaquín Maqueda, padre, “No te imaginas- comenta Maqueda, hijo- la que había que montar para dar de comer a 500  o  600 personas en parajes rurales como Aracena o Facinas: sillas, mesas, cuberterías, maquinaria, comida, personal y mil cosas mas, ¡una locura! –
Otro par de años cogieron la Caseta de ganadores  y Labradores de Jerez y alguna que otra caseta en  El Puerto de Santa María y Facinas  “otra locura- vuelve a comentar Joaquín”).

Joaquín Maqueda muere en el mes de Abril de 1990 en un trágico y lamentable accidente de trafico. Dos años después su mujer Ángela y sus dos hijas se trasladan a Sevilla donde las hijas  cursan sus estudios académicos y universitarios. Las dos eligieron el mundo del arte y una de ellas, Mª Ángeles, terminó su graduación en Bellas Artes obteniendo el mejor expediente académico de España de su promoción, por lo que le concedieron la Medalla de La Maestranza en Sevilla  y en Madrid una beca académica, siendo discípula del gran imaginero Minarro. Actualmente acaba de terminar su tesis doctoral y trabaja de profesora en la Universidad de Bellas Artes de Sevilla.
Su hija Mª Elena eligió el mundo de la cerámica, un mundo complicado y difícil. Compagina su arte con algunos otros trabajos esporádicos que le sirven para sobrevivir.

Su  hijo, Joaquín Maqueda  Pérez,  desde muy joven trabajó con su padre  y es el que continua viviendo en Rota y el que siguió sus pasos de Hostelería. Se casó con Rocío Castro Villanueva, chipionera, el 30 de septiembre de 1993. Tienen dos hijos Juana María y José Joaquín. A la muerte  de su padre se hizo cargo del Bar Playa. Actualmente regenta también La Parrilla en el recinto ferial, en la Caseta de los Funcionarios.
AFICIONES
Una de las grandes aficiones de Joaquín era el futbol. Colaboró  con las entidades deportivas locales, tanto con el CD Rota como con la UD Roteña  dotando en varias ocasiones a dichos clubs de equitaciones y material deportivo. En su afán de colaboración  fundó  por aquel entonces el equipo de fútbol del Navy Exchange tanto masculino como femenino y organizaba visitas a Facinas, pedanía de Tarifa, donde jugaban al futbol en un campo lleno de cardos borriqueros y desniveles, donde solía pastar el ganado y que era conocido por “Matavacas”. Años después, en el año 2000 allí mismo el Ayuntamiento terminaría construyendo un campo de futbol de verdad, con césped y gradas. Se llama Estadio Joaquín Maqueda en honor a nuestro personaje.

Calle de Facinas

En la inauguración del Estadio, “Chanito”, apodo por el que se conoce  al entonces alcalde del pueblo, dirigió a los asistentes unas emotivas palabras recordando como Joaquín dotó a aquel maltrecho terreno de juegos de porterías con red y vestuarios para todos los jugadores, así como con  camisetas, calzonas, medias e incluso botas reglamentarias. Recordaba “Chanito” que era un espectáculo cuando llegaban las Pic Up americanas blancas cargas de material deportivo y como los jóvenes de entonces, entre los que se encontraba él,  disfrutaban probándose las distintas y coloridas tallas, como si fuese un maravilloso día de Reyes Magos. Recordaba también los días en que  aquellos equipos de fútbol roteños y americanos llegaban a aquella pequeña pedanía monótona y azotada por el implacable levante del Estrecho a batirse en duelo con los jóvenes lugareños fornidos y ansiosos por demostrar sus habilidades con el balón contra los extranjeros y demostrar así a sus embelezadas, curiosas y excitadas jóvenes por la presencia de caras nuevas, quienes eran los mejores.
El nombre de Facinas está muy ligado a nuestro personaje y no tanto por el hecho de que el estadio de fútbol lleve su nombre, sino  particularmente por que es el sitio donde nació su primera esposa y donde sería enterrada cuando falleció.  Allí acudía  él a menudo , le parecía como si estando allí se encontrase mas cerca de la que fue su primer amor. Y allí, junto a Juana María , fue enterrado él cuando falleció.
Joaquín Maqueda   fue un hombre que gracias a su dilatada vida laboral y social, y sobretodo por su carácter humano, cordial amable y cariñoso se gano el respeto y afecto de gran parte de los ciudadano de Rota . En resumen y como dice el poeta, Joaquín Maqueda  fue “un hombre en el buen sentido de la palabra, bueno”.